Visitar las granjas en Cuba es una experiencia significativamente holística que visitar la mayoría de las granjas en América del Norte, debido principalmente a la agricultura orgánica universal y las prácticas de sostenibilidad en toda Cuba. Con la caída de la Unión Soviética, Cuba se encontró en una situación económica de extrema desesperación, sin petróleo o pesticidas disponibles, la población de Cuba se enfrentó a la amenaza de la hambruna. La única alternativa a la agricultura moderna era el regreso a los métodos tradicionales de cultivo de la tierra sin pesticidas ni equipos agrícolas costosos. Aunque las prácticas agrícolas industriales permanecieron fuera del alcance de los agricultores de Cuba, este nuevo desafío incitó a la gente a crear granjas orgánicas totalmente sostenibles en pequeñas parcelas que podrían producir suficiente comida para mantener los cultivos y a la comunidad cercana.

Una pequeña granja ubicada en Matanzas, Cuba, conocida como Finca La Coincidencia, no es diferente. La modesta granja, totalmente sostenible y orgánica produce una gran cantidad de productos agrícolas: frutas, verduras, arroz y café, pero con una edición extraordinaria conocida como el evento Arte del Fuego y el jardín de esculturas que lo acompaña. Inaugurado en la década de 1990 por una familia de artesanos de Correa, el evento reúne a escultores de todo el país para intercambiar ideas, mostrar su trabajo y contribuir a un proyecto que combina el arte y la agricultura en perfecta armonía.

El propietario, Héctor, ofrece a los visitantes de la granja su filosofía singular y poética sobre cómo el arte y la tierra funcionan de forma sinérgica para darnos todo lo que necesitamos en la vida. El híbrido entre la escuela, el taller y la galería de Finca La Coincidencia se ha convertido en una veneración internacional como un brillante ejemplo del poder de combinar el ingenio con la expresión creativa para crear algo que nutre el cuerpo y el espíritu.